Estando en aquellas partes le traxeron vn endemoniado, al qual como sant Vicente conjurasse, y le echasse del agua que le auian traydo por bendita: el diablo sin mas verguença recogia el agua, y lauauase con ella la cara, diziendo en Valenciano: A tan bona es aquesta aygua. Entonces dixo el santo, que aquella agua no era bendita: y assi bendiziendola de nueuo, se la echo encima, y el demonio a su pesar huuo de salir del hombre.